Conoce el libro, I Ching
El I Ching es un libro sapiencial lleno de sabiduría, y al mismo tiempo un libro de práctica adivinatoria u oracular. El lado sapiencial obviamente es una fuente de sabiduría de vida, pero como un oráculo busca hallar la armonía, y el camino correcto.
La aparición del Yin y del Yang salen a relucir en el I Ching por medio de la interacción de líneas como lo son las siguientes; interrumpidas (- -) en el Yin, y continuas (–) en el Yang, junto con estas líneas es como se formaran ocho figuras todas de tres líneas cada una, a las que se le conoce con el nombre de trigramas, que son nada más y nada menos que las bases de muchos conceptos y prácticas de la cultura China, pero en este caso, es el fundamento del método de adivinación I Ching.
Estas se intercambian formando de esta manera una serie de 64 figuras de seis líneas, llamadas hexagramas y son las 64 Combinaciones que posee el I Ching. En el caso de encontrar la versión completa de este método denominado con I Ching, contiene una lectura distinta e individual para cada hexagrama y conjuntamente para cada línea que permanezca sola, sobre aquello que la persona piensa mientras que realiza su respectiva consulta, o sobre aquello que pidió consejo.
Aspectos que hay que tener en cuenta para su interpretación:
Antes de iniciar su consulta, usted debería tener en mente la o las preguntas en las que usted está interesado con respecto a su vida, luego comience la consulta, y en su trayecto vaya tomando nota del consejo del cuadro de los resultados. Usted tiene y debe interpretarlo de la mejor manera que lo pueda entender. Cuando realice una pregunta, recuerde usted hacerla lo más específica y concreta que pueda, ya que mientras más amplia sea la pregunto, mas difícil le será entender la respuesta. Cuando haya realizado la pregunta, consulte nuevamente las notas escritas, ya que de esta manera estará evaluando nuevamente lo que interpreto al principio.
Quizá su interpretación cambie un poco o por el contrario no verá nada importante inmediatamente, y esto suele ser porque nosotros mismos solemos limitarnos esperando más que aquello que obtenemos, así que es posible, que un momento más tarde de haber realizado la consulta, el resultado llegue a nosotros de manera espontanea e inesperada.
Una vez que entramos al mundo del I Ching podemos entender miles de cambios y como se producen en nosotros, de manera que nos da una dirección única e innata hacia un cambio, con respecto a la situación en la que nos encontremos, además de la posibilidad de descubrir contradicciones escondidas tras las apariencias de nuestra propia vida, ya que lo que nos ofrece este método específicamente abrir los ojos hacia esos cambios que se producen en nosotros de los que desgraciadamente nunca nos percatamos. Algunos podrían creer que se está adivinando el futuro, pero solo se trata de una previsión, sencillamente la comprensión de la relación que existe entre los acontecimientos.